La red de ductos por donde se transporta combustible en el país representa un riesgo para la población al igual que el huachicoleo, dado que no opera en condiciones óptimas.
El Centro Nacional del Control de Gas, organismo encargado de vigilar, rehabilitar y dar mantenimiento a la red de ductos, detectó que el 70 por ciento de éstos tienen más de 35 o 40 años en operación, lo que rebasa su periodo de vida útil, han sufrido deterioro y no cubren los requerimientos de seguridad y normatividad.
Por ello, el Cenagas ha solicitado recursos a Pemex, que no han sido asignados.